La familia de Pedro Hernández Ortega, el vecino de San Mateo que fue asesinado en 2014, continúa “buscando respuestas”.
La instrucción del caso continúa desarrollándose en el Juzgado de Instrucción nº8 de Las Palmas de Gran Canaria. Según la familia, tras más de dos años de investigación, las diligencias se han centrado en identificar la culpabilidad de las últimas personas que vieron con vida a Pedro Hernández aquel 15 de noviembre. La familia del fallecido lamenta que la investigación se haya visto retrasada en reiteradas ocasiones por las dificultades en materia de obtención de los resultados de las pruebas biológicas, unas pruebas cuyo tratamiento y custodia la familia califica de “nefastas”. Tanto es así que la familia anuncia que ha tenido que querellarse con el Instituto de Medicina Legal de Las Palmas.
Ya en noviembre del pasado año la familia denunció públicamente que el caso estaba “bloqueado”. Por estos hechos, en mayo de 2016 dos personas entraron en prisión y otras dos pasaron a ser investigadas. Todos ellos, lamenta la familia “andan libres en la calle, haciendo su vida normal”.
Pedro Hernández, vecino de San Mateo, desapareció en noviembre de 2014 y no feu hasta enero de 2015 cuando su cuerpo apareció semi enterrado en los Pinos de Gáldar.