La fiesta que se ha anunciado para este sábado en Gran Canaria bajo el nombre de Canaryland y en cuyo cartel figuraban varios djs de renombre, continúa dando que hablar.
A pesar de que desde hace más de una semana, varias empresas y djs habían alertado que la fiesta que se estaba promocionando podía ser falsa, la persona organizadora ha continuado dando difusión al cartel, lo que ha provocado un aluvión de desmentidos hechos públicos tanto por la gerencia del local donde supuestamente se había trasladado el evento, como por diferentes djs que aseguran que los contratos no se han formalizado y que, por tanto, no asistirán a la fiesta.
En la jornada de ayer, el principal reclamo de la fiesta, el dj Danny Romero, hacía público en su perfil de Facebook un mensaje en el que anunciaba que no asistirá al evento, asegurando que la contratación no se ha formalizado. Los mismos pasos siguió ayer la dirección del local Zona13, donde se anunció que se trasladaba la fiesta después de que el martes Lago Taurito se desmarcara de la misma de forma pública. Según Zona13 en ningún momento ha habido ningún tipo de acuerdo para acoger esta fiesta, y desde la dirección han anunciado que denunciarán el caso ante en los organismos pertinentes. También ayer viernes, otro de los djs en cartel, Heri Santana, señalaba en redes sociales que el evento en cuestión es falso, asegurando que no estará este fin de semana en Gran Canaria. Por otra parte, el dj Ubay Hernández anunciaba esta semana públicamente la cancelación de la fiesta.
Ante este aluvión de desmentidos, que ha originado una oleada de críticas, la persona responsable de la organización de la fiesta continúa afirmando en las redes sociales que la fiesta es real, publicando capturas de supuestas conversaciones, transferencias y contratos (en los que no se refleja ninguna firma ni sello que los certifique, sino únicamente texto) y ha anunciado un reguero de denuncias.
Este caso se produce apenas cuatro meses después de que el satauteño conocido como “Pepe Fiestas” fuera también denunciado como organizador de eventos y fiestas que no se celebraban, sin que se produjera el reintegro del dinero pagado por los afectados. Profesionales del sector han lamentado públicamente que se realicen este tipo de estafas, que dañan la imagen de las empresas organizadoras de eventos que actúan con seriedad, así como de todas aquellas personas implicadas en los mismos.